Un grupo de pescadores aficionados a la captura del salmón protagonizó ayer una protesta en el coto de Ximonde, en el río Ulla (entre A Estrada y Vedra). La medida tiene por objeto mostrar el malestar suscitado entre un buen número de pescadores por el sistema de adjudicación de cotos salmoneros a casas de turismo rural llevado a cabo por la Xunta por primera vez este año, y contemplado en la Ley de Pesca.
En este sentido, los pescadores detractores de esta medida señalan que no tienen nada "en contra de los establecimientos", pero sí "del sistema aplicado, que puede ser legal desde el punto de vista de la normativa, pero ni es ético, ni democrático y nos parece discriminatorio, porque parece que sólo puede pescar el que tenga dinero".
"El coto directo, es decir, sin ser a través de un establecimiento rural, es de 9 euros, mientras que a través de una casa pagas 120 euros y te lo aseguras", sostiene uno de los afectados, que reservó habitación en uno de estos establecimientos del Ulla y obtuvo el permiso para pescar un salmón. "Un compañero y yo plantamos la caña en señal de protesta", insiste. A ellos se unieron otros pescadores para desplegar la pancarta.
Los detractores sostienen que los establecimientos se llevaron "todos los permisos para dos de los tres cotos salmoneros del Ulla en la mejor temporada, que es del 1 al 20 de mayo". Estos son Ximonde y Sinde (este a caballo de los municipios de Padrón y A Estrada), el primero con 4 cañas al día y el segundo con seis.
El de Couso (entre los ayuntamientos de Teo y A Estrada), también con seis cañas/día, no fue solicitado por ningún establecimiento rural, según los pescadores. Al parecer la mala fama que lo rodea desde hace cinco años al no caer un solo ejemplar de salmón tiene mucho que ver. Consideran que esta situación también es discriminatoria.
Reclaman soluciones
Los pescadores, que anuncian una movilización en el concurso de salmónidos de A Estrada, exigen soluciones como ampliar el número de cañas en el Ulla o abrir un tramo de pesca libre de salmón en el río, entre otras. Sostienen que en noviembre ya se habían cubierto los algo más de 450 permisos de la temporada y "hubo mil peticiones".
En este sentido, los pescadores detractores de esta medida señalan que no tienen nada "en contra de los establecimientos", pero sí "del sistema aplicado, que puede ser legal desde el punto de vista de la normativa, pero ni es ético, ni democrático y nos parece discriminatorio, porque parece que sólo puede pescar el que tenga dinero".
"El coto directo, es decir, sin ser a través de un establecimiento rural, es de 9 euros, mientras que a través de una casa pagas 120 euros y te lo aseguras", sostiene uno de los afectados, que reservó habitación en uno de estos establecimientos del Ulla y obtuvo el permiso para pescar un salmón. "Un compañero y yo plantamos la caña en señal de protesta", insiste. A ellos se unieron otros pescadores para desplegar la pancarta.
Los detractores sostienen que los establecimientos se llevaron "todos los permisos para dos de los tres cotos salmoneros del Ulla en la mejor temporada, que es del 1 al 20 de mayo". Estos son Ximonde y Sinde (este a caballo de los municipios de Padrón y A Estrada), el primero con 4 cañas al día y el segundo con seis.
El de Couso (entre los ayuntamientos de Teo y A Estrada), también con seis cañas/día, no fue solicitado por ningún establecimiento rural, según los pescadores. Al parecer la mala fama que lo rodea desde hace cinco años al no caer un solo ejemplar de salmón tiene mucho que ver. Consideran que esta situación también es discriminatoria.
Reclaman soluciones
Los pescadores, que anuncian una movilización en el concurso de salmónidos de A Estrada, exigen soluciones como ampliar el número de cañas en el Ulla o abrir un tramo de pesca libre de salmón en el río, entre otras. Sostienen que en noviembre ya se habían cubierto los algo más de 450 permisos de la temporada y "hubo mil peticiones".
Fonte: O Correo Galego
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